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No nos extrañe que cada vez más vayamos viendo como siguen cerrando negocios tanto locales como cadenas internacionales. Tiendas como Sears, Payless, Kmart, Zales y la más reciente como ayer Sams, dejando a cientos de empleados sin sus puestos de trabajo.
Podemos culpar de cierta forma al gobierno y a la crisis económica por la que está pasando nuestra isla. Los altos costos de utilidad, así como la renta y la ambivalencia de los arrendadores, impuestos en la propiedad, inestabilidad política con cambios de leyes y regulaciones constantemente, hace que ésta industria al detal se vea cada vez más afectada.
Pero si lo analizamos desde otro punto de vista, la conducta del consumidor ha cambiado dramáticamente, haciendo que cada vez seamos más exigentes a la hora de comprar requiriendo más alternativas de productos, más económicos y evitando pasar trabajo a la hora de comprar algo que necesitamos o queremos.
Cuántos no hemos querido comprar un traje de baño en diciembre o enero y solo ofrecen ropa de invierno. Si estabas buscando un producto en particular tenías que empezar semanas antes, visitando tienda por tienda y terminabas en la primera que visitaste. Los zapatos que te encantaron nunca los había de tu tamaño y te mandaban a otro pueblo para que los compraras. Esto sin mencionar el precio de adquisición, muchas veces sobrepasando más del 40% más económico por la internet.
Actualmente hay más de 1.2 millones de puertorriqueños conectados a la internet y en los pasados años hemos gastado sobre $112 millones de dólares en ventas por internet. Todo lo conseguimos a través de un click porque ya le hemos perdido el miedo a comprar por internet y cada vez incrementa este comportamiento.
Esto hace que cambiemos la manera de consumir. El acceso a la internet y la tecnología nos ha abierto a un mercado más global poniendo en jaque el estilo de consumir de años pasados. Los centros comerciales es uno de los mercados que están tomando un giro drástico en su comportamiento, ya que tienen que comenzar a mejorar su infraestructura, diversificarse y mejorar la tecnología.
Así que no es un cambio solamente en nuestra isla. Hay nuevas tendencias y modelos de negocios que están obligando a realizar una transición a todo negocio que desee prosperar de aquí en adelante. Como comerciantes es hora de informarnos hacia dónde van los clientes, cómo están buscando los productos o servicios y adelantarnos a ellos. Como consumidores sabemos que por internet encontramos cualquier producto y servicio en menos de 1 hora.